jueves, 28 de agosto de 2014

La persecución en tres mundos

Caminar es un acto excelso porque permite en mi mente que los pensamientos bailen coordinadamente, y que de vez en cuando saquen a bailar a las quimeras, posibilidades y a las ilusiones. Sin embargo el camino donde me encontraba tenía características siniestras que interrumpían la música cerebral. Estaban las piedras en el suelo, las cuales no miraba porque mis ojos se ausentan en esas noches de gala metafísicas, y terminaba por tropezarme en varias ocasiones. Me propuse detener la fiesta mental mientras pasaba por allí, de ese modo lograba esquivar los barros del tumultuoso sendero. 

Había algo más que interrumpía mis divagaciones, o  "alguien". Sentí su presencia, me lo advirtió mi espalda que se llena de arañas caminantes cuando un intruso está cerca. Esta cosa, o ese alguien, se acercaba cada vez más. No quise voltear a ver, por ese temor a lo desconocido que a veces prefiere no cruzar el puente macabro. A esto me vinieron las suposiciones de que podría ser. Pensé en todo tipo de espectros, por mera diversión que lograba distraerme de la intriga abrumadora que oprimía mi pecho. A mi imaginación vinieron los extraterrestres, lo cual no estaría mal, pues saldría en programas sobre el fenómeno dando mi testimonio y al fin lograría una de mis metas absurdas: ser un loco público. También me supuse que era un duende, criaturas que no me provocaban miedo, más bien risa. No malinterpreten, no es la estatura lo que me causa gracia, sino la mera alusión a los siete enanos que inevitablemente tendría si llego a ver alguno. 

Esta presencia, porque ahora si estaba seguro de que era alguien, se colocó a mi lado, y tuve la esperanza de que me pasara de largo. Pero no. Siguió allí y se acercaba a mi hombro poco a poco. Aun así no lo miré, solo note que caminaba, o al menos se movía a mi velocidad. Ralentice mis pasos para ver que hacía, y como lo sospeche hizo lo mismo. Llega un punto en que el espanto dura tanto que un coraje irracional y proveniente de no se sabe dónde, nos llega. Y cuando lo tuve decidí parar y dirigirme hacía él y enfrentarlo. No lo pensé más, si seguía pensando nunca lo hubiera hecho. El momento llego, me detuve y...

El olor a pino es delicioso, y me encantaba caminar entre ellos. Ahora el baile de mis pensamientos tenía aroma, me gusta pensar que ese olor era la droga que mis pensamientos necesitaban para desinhibirse e invitar a bailar a todo lo que en mi mente se encuentra, desde los recuerdos más lejanos hasta las fantasías más idiotas. El bosque se tornaba espeso y lúgubre. Los pinos comenzaban a tener una extraña forma a medida que oscurecía. De repente noté que tenían ojos, y supuse que eran ciegos a pesar de esto, pues sus pupilas miraban a la misma dirección, y cuando hacía gestos con las manos, no se movilizaban. Incluso a uno quise tocarle el ojo con mi índice, pero me puse en el lugar de él, y seguí andando. 

Ya era completamente de noche, creí que como no había nubes, por lógica habría estrellas, pero estaba equivocado, y eso me entristeció. Miraba hacia las ramas de los pinos ciegos, buscando búhos o lechuzas, aves que siempre me han interesado, pero no había ni la menor señal de esas criaturas. Una silueta oscura estaba a unos cuantos metros de mí. Seguí avanzando a pesar que estaba tiritando, pues la temperatura bajaba mientras  me acercaba. No sé si fue ilusión óptica pero la figura desapareció. Me alivie y respire tranquilo. Busqué la luna y tampoco estaba, al darme cuenta de eso una risa burlona como de niña malcriada surgió de algún rincón del bosque. ¡Oh sorpresa! Los pinos son videntes, empero seguían sin notarme, sino que se lanzaban miradas cómplices. Al cabo de dos pasos entendí por qué. Las arañas en mi espalda, la incomodes en su peor estado, el miedo, la paranoia, en fin, la presencia volvió. 

Me dije que tal vez esta presencia fue la que se burló del hecho de que no encontré la luna hace algunos minutos. Ahora los ojos de los pinos estaban fijados a mi espalda, o sea, al ente, ángel, demonio, espanto, lo que sea, me canse de llamarle presencia. Rayos, lo volví a hacer. Desistí de la idea de creer que era un ángel, porque fuese lo que fuese no era positivo. Si lo fuera, dejaría que mis pensamientos danzaran con la seguridad necesaria. Esta vez me plantee otra estratagema diferente a la de enfrentarlo. Creí que lo mejor era huir. Así que acelere el paso, hasta correr con un frenetismo  exacerbado, hasta darme cuenta como coyote de dibujos animados que corría sin suelo. Al caer, quise dar vuelta a mi cuerpo para por lo menos ver lo que provocó este suicidio absurdo. Y estaba allí, y me desilusione porque no distinguí que era, o si, a ver, que podría ser...

Termine de desayunar, y con mucha pereza tire los platos a la lava trastes, de tal forma indiferente que por un milagro no se quebraron. Me puse mi chaleco, apagué el televisor, salí, cerré con llave, y al hacer todo esto me vino el pesar de que hago todo esto, todos los días, y aun así lo seguía haciendo. Al comenzar el peregrinaje hacia mi trabajo, desee mucho que algo diferente me pasara, pero al momento me arrepentí porque ahí estaba de nuevo, detrás de mí, acechando, molestando, incomodando. La presencia... 



jueves, 31 de julio de 2014

Aliados de la nostalgia.

Que las manecillas griten segundo a segundo la soledad,
que se prepare el espacio vacío para poder,
navegar en él y así desprender,
con el tiempo y la música la tediosa eternidad.

Que hagan fiesta los entes de la distancia,
que bailen, canten, beban y celebren,
cuando los corazones no mienten,
y se derriten en las bocas llenas de falacia.

Remembras en tus arterias la humillación,
la risa hipócrita de la estrechez,
el calor sofocante de la estupidez,
hormiga en la realidad, león en la imaginación.

Éxtasis o sosiego musical,
uno de dos, dos de uno,
los dos para  uno,
y la mente es aparte de lo banal.

Lo viral...

Aleja al cuerpo de donde pertenece,
las manos sudan de preludio,
los ojos lloran mercurio,
y el cerebro está donde merece.

La luz del túnel se contagia,
en los mártires y su silencio,
en la soledad cuyo acompañamiento,
son los aliados de la nostalgia.

¿Quiénes mas? ¿Cuáles mas? 


                                                    Foto: Jimmy Varela.









viernes, 18 de julio de 2014

Brasil, el mundial donde el espectáculo regresó.

En los últimos dos mundiales el deporte más famoso del mundo se vio envuelto en una clima de consternación, ya que la calidad de los partidos se notaba únicamente en lo táctico. Los goles, la fantasía, los estilos futbolísticos de vanguardia parecían extinguirse.

Por ahí dicen que todo lo bueno tiene que acabar, y con el mundial de Brasil se ha comprobado, lo positivo para los aficionados es que el torneo se reanudará, lo negativo es que deben esperar 4 años, para volver a gozar de uno de los eventos deportivos más importantes del planeta.
Muchos expertos del fútbol ya consideran el mundial de Brasil 2014 como uno de los mejores en la historia. La presente generación escuchó relatos grandiosos del mundial de México en 1970, donde brilló el Brasil de Pelé, otros siguen emocionándose al recordar la Naranja Mecánica de Cruyff en Alemania 1974, la gran actuación de Maradona en  1986, y el gran mundial que Estados Unidos organizó en 1994.
Todo ese fútbol que maravilló a los padres y abuelos de esta generación parecía no volver, sobre todo por la falta de brillo en los mundiales de Alemania 2006 y específicamente en el de Sudáfrica 2010, en el cual sino hubiera sido por el gran desempeño y estilo vistoso de la selección de España, sería una competición para nunca remembrar.

Goles.

La frase “Los goles son amores” enmarca la importancia de una buena cantidad de dianas en un partido, y no digamos en un mundial. Si bien es cierto, no siempre en un partido de fútbol su calidad se mide por sus goles, pero no se puede negar que estos son la esencia de la pasión que desborda en los aficionados, las tribunas no se encienden tanto como cuando anota el equipo local, ni tampoco se apagan de tal escalofriante modo cuando lo hace el rival.
En este mundial se anotaron 171 tantos en los 64 encuentros que se disputaron, igualando así la marca del mundial de Francia 1998, convirtiéndose en los mundiales con más goles en la historia. Solo en la fase de grupos se convirtieron 136 goles, (promedio de tres por partido) nueve menos de los que se hicieron en los 64 juegos de Sudáfrica y 11 debajo de los que cayeron en Alemania 2006.

La sorpresa.

La expectativa para la selección de Costa Rica era muy baja para este mundial, a causa del grupo en donde fue colocado en el sorteo, junto con tres campeones de mundiales: Uruguay, Italia e Inglaterra. Aun así la selección del entrenador colombiano Jose Luis Pinto demostró que nada es imposible y logró clasificar a la siguiente ronda como primero de grupo, anotando cuatro goles y solo con uno en contra. Derrotó con categoría al equipo charrúa, dándole vuelta al marcador en el segundo tiempo, 3-1,  de esta manera el equipo tico se puso en boca de todos, y la celebración se proporcionó cuando vencieron a los italianos 1-0, así demostraron que lo del primer partido no fue en absoluto un accidente.
En octavos de final se toparon con un equipo sumamente complicado, muchos lo denominan “rocoso” ya que es muy difícil anotarle goles gracias a su recia defensa. Grecia llegaba a la cita de forma milagrosa, después de convertir un penal en gol al último minuto contra Costa de Marfil. Empero la Costa que le tocaría enfrentar después sería el doble de complicado. Al término de los 90 minutos el marcador fue 1-1, en tiempo extras el cansancio fue el victorioso sobre las piernas de los 22 jugadores. En penales, el arquero costarricense Keylor Navas se haría héroe, por medio de sus dos atajadas Costa Rica pasaba a cuartos de final, la primera vez que un equipo Centroamericano llegaba a esas instancias.

La Holanda de Robben.

En cuartos de final Costa Rica sería eliminada dignamente por Holanda en tanda de penales, un cambio a los últimos minutos del tiempo extra definiría el encuentro. Tim Krul, “el portero de los penales” fue el arma secreta de Luis Van Gaal, quien ya sabía que su tercer portero había estudiado con minuciosidad los penales costarricenses en el encuentro anterior, sumándole a esto el juego psicológico que el jugador naranja hiso, al advertirles a los pateadores ticos, antes de los penales, que ya sabía él como hacían los tiros.
Esto demostró, una vez más, la gran categoría del equipo holandés, que fue el primero en sorprender en el mundial, al anotarle, en su primer encuentro, cinco goles a la que entonces era el campeón defensor España. Mientras abdicaba el rey, también lo hacía la selección de Vicente del Bosque, que en el siguiente partido sería derrotado por Chile, de este modo se unían a la lista de campeones defensores eliminados en la primera fase, como Italia en el 2010, y Francia en el 2002.

La gran condición física de Arjen Robben fue sin lugar a dudas de lo que más admiración provocó en el mundial. La edad de 30 años no parecía concordar con la velocidad en sus piernas y la capacidad para crear jugadas de peligro gracias a esa facultad. Fueron 79,309 kilómetros, casi 80, los que recorrió el delantero, junto con esto se suman los tres goles que anoto para la selección que con él crecía su ilusión de al fin lograr la copa del mundo tras haber sido derrotados en la última final ante España.
El camino de Holanda termino en la tanda de penales ante la selección de Argentina en las semifinales, conformándose con el tercer lugar que adquirió en el duelo donde venció a una furibunda Brasil. Los holandeses regresaron a casa con el único consuelo de poder vengarse de la selección que los privo de la máxima gloria cuatro años atrás.

La magia de James

En muchos mundiales ocurre que un equipo deslumbra y se gana el corazón de los fanáticos del mundo, sin haber sido el campeón, en este caso Colombia es considerado como la oncena que mejor fútbol practico; claro, dinámico, ofensivo, pero lo más agradable fue la alegría con la que jugaban, dando un color especial a la competición.
En enero pasado la selección cafetera iba a recibir una pésima noticia, Radamel Falcao el referente, la estrella del fútbol en Europa, se lesiona el ligamento cruzado derecho de la rodilla y por lo tanto se perdería el mundial. Para muchos las aspiraciones de Colombia disminuían con este hecho. Sin embargo en el medio campo tienen a un joven que no permitió que se extrañe en demasía a Radamel, James Rodriguez, la revelación del mundial con tan solo 22 años, se ha convertido, con seis tantos, en el goleador del torneo, confiriéndosele así la tan ansiada bota de oro.
Esto hace que el mundial haya sido excelente para Colombia, que después de haber hecho una fase de grupos con campaña perfecta, derrotando a los tres equipos con contundencia, y luego de eliminar a una Uruguay afectada por el caso Suarez, llegaba con mucha ilusión a los cuartos de final donde enfrento al anfitrión Brasil.
De la Canarinha no pudieron pasar, y las lágrimas de James al final del partido reflejaban la convicción con la que el equipo esperaba más gloria en ese partido. La selección del argentino Jose Pekerman, regreso a su tierra con gran recibimiento, un pueblo que en el pasado ha sufrido tantos problemas sociales, y que tenía 16 años de no ver a Colombia en un mundial, es seguro que este jamás lo olvidará, el mundial de James, que con solo ver el golazo que le anotó a Uruguay, los sudamericanos estarán felices de no solo contar con un tigre como Falcao sino también con un genio como James Rodriguez.
La mordida de la discordia

El partido era Uruguay versus Italia, el definitorio para saber cuál de los dos pasaría a la siguiente ronda, se jugaba mucho en el campo. En el segundo tiempo, en una jugada tiro de esquina, la selección charrúa conseguiría el gol que les permitía pasar, pero unos minutos antes ocurrió un hecho reprobable que marcaría al equipo de Oscar Washington Tabares.

El delantero del Liverpool de Inglaterra, Luis Suarez le propino una mordisco el defensor italiano Giorgio Chellini, situación que el árbitro mejicano Marco Antonio Rodriguez no vio, pero si las numerosas cámaras que transmitían para millones de televidentes en el globo terráqueo. Concluido el partido las reacciones no se hicieron esperar, las discusiones entre periodistas, la presión que estos ejercían para que se le aplique un castigo merecedor del acto.

La FIFA se reunió y tomó una decisión que incluso para los que pedían una sanción rigurosa, la que el organismo determinó, sobrepaso los límites. Cuatro meses sin poder jugar y sin poder asistir a cualquier evento que tenga que ver con el fútbol. El crack del equipo, se marchó de Brasil, con la tristeza de no poder jugar contra Colombia. El equipo quedó afectado psicológicamente, situación que atenuó su baja calidad de juego en el último partido. Fue el hecho tal vez más polémico y que será hablado durante muchos años, la mordida de la discordia, entre los uruguayos y el mundo.

Lagrimas verde y amarillas.

El fútbol de Brasil venía provocando muchas dudas de hace algunos años, los jugadores que le daban el famoso jogo bonito al equipo comenzaron a desaparecer, y el único que aun destella ese tipo de fantasía es el jugador de 22 años Neymar Da Silva, sobre su hombro se cargaba la única esperanza brasileña para ganar la copa del mundo en casa.

Brasil empezó el mundial con mucha polémica, la inversión para organizar el evento sobrepasaba los límites, tanto, que la renta en el país subió con esto muchas personas se quedaron sin hogar, sumándole las protestas anti-mundial de los grupos sindicales que exigían menos corrupción y más priorización en los asuntos sociales verdaderamente importantes.

Con todo ese clima de incertidumbre el equipo dirigido por Luis Felipe Scolari, debutaba el 13 de junio ante Croacia, derrotándolo gracias a un penal mal marcado y a un gol precedido de una falta no señalada en contra del mediocampista croata Ivan Rakitich. Varios creyeron, en base a este antecedente, que si el equipo de casa quedaba campeón sería por árbitros. Sin embargo la incidencia arbitral disminuyo, pero el mal fútbol de Brasil no lo hiso.

El empate ante México presagiaba que las cosas se complicarían antes de lo esperado. Los octavos de final contra Chile se decidieron en penales, y antes siquiera de que estos empezarán, los jugadores comenzaban a derramar lágrimas producto de la exacerbada presión que en ellos yacía. Lograron pasar de Chile, también ante una tímida Colombia, que no pudo mostrar el gran juego que venía practicando, ese que era mucho más parecido al jogo bonito de los viejos tiempos del equipo brasileño.

Al final la victoria en los cuartos de final, sería pírrica, en una jugada donde el colombiano Zuñiga saltó irresponsablemente con la rodilla levantada, impactando en la cadera de Neymar, fracturándole la vértebra. Más lágrimas salieron de nuevo, de un jugador brasileño, lágrimas de dolor físico y de decepción porque en ese momento supo que no jugaría los dos partidos que le quedaban a Brasil, pudiendo ser el segundo, la gran final en Maracaná.

La gran debacle sería en la semifinal, el gran choque en contra de su realidad para Brasil. El juego ante Alemania confirmó lo que se venía comentando y lo que en algunos brasileños se omitía por una nociva negación resultado del fanatismo hiperbolizado. La fórmula es sencilla, el gran juego de Alemania, conciso, preciso, de memoria, mas todo lo contrario, la descoordinación, las dudas, las malas decisiones, daban igual a un 7-1 histórico, algo quizá siete veces peor que el maracanazo de 1950.

Esta vez las lágrimas salían sin piedad de los brasileños en la cancha, las tribunas, calles y en las casas, lagrimas que no debieron ser si la conciencia del pueblo hubiera estado clara desde siempre, el equipo no era para campeón, pero solo de esa forma podían darse cuenta y de esa manera reconstruir concentradamente ahora, aquel fútbol del cual seguramente quedan vestigios, así se podría resurgir tal como lo hiso el Brasil de 1950, ocho años después, cuando gano su primera copa del mundo en el mundial de Suecia.

El merecedor campeón

Luego de la final perdida ante Brasil en el mundial de Japón y Corea 2002, Alemania sabía que un nuevo proyecto tendría que comenzar. No iba a ser fácil, tampoco de la noche a la mañana terminaría, eso les quedo claro cuando en la Eurocopa de Portugal en el 2004 fueron eliminados en la primera ronda. Dos años después les tocaba organizar el mundial, y con eso la presión de ser campeones en casa, tal y como lo lograron en 1974, derrotando a la Holanda del fútbol total.

El camino parecía perfecto, la gran tanda de penales ganada ante Argentina, avivaba la ilusión del pueblo teutón. Sin embargo en la semifinal se encontrarían contra un equipo ante el cual nunca ha ganado en partidos oficiales, el único que se exceptúa de aquella frase dicha por un inglés “El fútbol es un juego de 11 contra 11 y siempre gana Alemania” cuando el compromiso es contra Italia esa frase pierde absoluta validez.

Fueron eliminados en casa, en aquel estadio de Dortmund, en dos jugadas bien fraguadas por parte de los azzurri. El sueño se terminó en ese momento, al equipo le faltaba crecer más. En la Eurocopa 2008, jugaron la final ante la mejor España en la historia, y de nuevo volvían a quedarse con las manos vacías, la frustración se acentuaba, pero el proyecto debía seguir a cargo de Joachim Low, el proceso siempre se respetó, los alemanes sabían que culminaría algún día con la máxima gloria.  

Sudáfrica 2010 parecía ser su mundial, pero se quedaron cortos una vez más ante España en semifinales, la que después sería la campeona del mundo. Se preguntaron qué fue lo que faltó una vez más, pero de ninguna manera el técnico sería destituido. Eurocopa 2012, Italia los vuelve a vapulear, cualquiera se volvería loco y sacaría del puesto al entrenador Alemán, se jugaba como nunca los torneos pero los perdían como siempre. Pero los alemanes no son cualquiera, fríos, pacientes, calculadores y letales son sus características.

Debutaron en el mundial propinándole un paliza a la Portugal de Cristiano Ronaldo, el balón de oro del 2013. 4-0, las cosas no podrían ser mejor. Pero el calor de Brasil y la velocidad de los jugadores de Ghana, condimentarían su camino con drama y sufrimiento. Luego en octavos, Argelia fue el otro equipo africano destinado a complicarlos, pero guardaron la calma y salieron vivos del partido.

Con el juego más letal y conciso, solido en defensa, efectivo en ataque, delanteros altos como Gerrar Muller y el veterano Miroslav Klose, el hombre que ahora posee el record de mayor goles anotados en la historia de los mundiales, mismo que se lo quito al brasileño Ronaldo, justamente en el partido contra Brasil. Todos lo sabían, algunos no lo decían por tener la cultura del pronóstico reservado, pero solamente era natural que luego de ese 7-1, los barbaros se coronarán campeones el 13 de julio.

Les toco Argentina, la Argentina de Messi, oncena que llegó con dudas incluso a la final, sin embargo para muchos fue su mejor juego. La defensa fue muy equilibrada, tanto que llevo el partido al tiempo extra, junto con dos sustos para los alemanes, Gonzalo Higuaín tuvo la más clara, y en el segundo tiempo Rodrigo Palacio definió pésimo en un mano a mano contra el mejor portero del mundial Manuel Nuewer.
Pero a siete minutos de que la final se decidiera en penales (7 será el número más usado en las casas de loterías alemanas) el joven jugador del Bayern Múnich, Mario Gotze definió de forma espectacular y casi sin ángulo, venciendo al cancerbero albiceleste, Sergio Romero.

Y así concluye el mundial de Brasil, o mejor dicho de Alemania, que por primera vez es campeón con el país unificado, las últimas 3 veces lo había hecho con el equipo de la Alemania federal. El que persevera alcanza, y los alemanes lo han hecho con este proceso desde el 2006, cayendo varias veces, sufriendo mucho, pero con la copa levantada, esas derrotas ahora solo serán anécdotas.


El mejor mundial para muchos de los de la presente generación. Los mundiales en América siempre han sido especiales, y aunque en este se dio por primera vez que lo ganará un equipo europeo, sin duda para otros americanos también se obtuvo varias satisfacciones, Colombia con su alegría, la sorpresa inolvidable de Costa Rica, la sufrida Argentina que volvió a una final luego de 24 años y así muchos otros grandiosos precedentes que dejó el mundial donde el espectáculo regresó. 


domingo, 13 de julio de 2014

Lo que me gusta

Lo que me gusta es ver su mensaje de buenos días y tener la certeza de que será bueno porque usted me lo dice y porque sus manos tomaré.

Lo que me gusta es ver sus ojos tiernos, sus labios moverse al desahogarse y sentirme su confidente

Lo que me gusta es extrañarla aunque no me guste hacerlo tanto, ya que el ansia asfixia por no tener los besos vitales.

Lo que me gusta es entrelazar mis dedos con los suyos porque siento que es un reflejo de nuestras almas entrelazadas fuertemente. 

Tantos aspectos, matices, detalles que me gustan, pero lo que mas me gusta es que yo le guste, me gusta quererla y que me quiera haciendo este sentimiento mas grande y especial. 

viernes, 27 de junio de 2014

La mujer suicida "Lo que pasa en la Ciudad Odrusba"

A Rubén le da por elegir caminos diferentes en ciertos días, sobre todo en los nublados que imperan en la ciudad Absurdo. El callejón estrecho desechaba el frío del momento, y los constantes choques contra los seres sin aura, que buscan en el concurrido mercado objetos ilusorios para llenar vacíos que luego quedan más profundos. 

Las multitudes le daban asco, entre más densas, mayor la náusea. El ruido lo saturaba tanto que deseaba tener en su cerebro un  C-4 para acabar con la tortura. Se maldijo a sí mismo en todo lo que duró esa travesía estúpida entre los puestos de ventas ilógicas, por haberse metido sin necesidad en ese ambiente de olores putrefactos. Faltaba mucho para salir del laberinto sedicioso, sin embargo sus ojos se conectaron con lo que creía en ese momento era la libertad y el placer. 

¿Puede ser una mujer, que lleva puesto un vestido verde claro, en ese día tan gris, alguien peligroso? a Rubén no le importó esa sospecha, solo la observaba, y cierta energía hasta ese momento desconocida, hizo que sus pies lo trasladarán hacia ella. Su aura le parecía indefinible, tratar de percibirlo acentuaba su misterio, un ser que despierta curiosidad al más desinteresado de todos.  

Al encontrarse frente a ella, no supo que palabra soltar, a diferencia de su piel, que transpiraba en demasía, soltando el líquido salado inverosímil a toda costa. "Sígueme si buscas algo de mí". Ante la oferta Rubén se ruborizó e inmediatamente sintió el golpe de los rizos rubios que se elevaron después del giro veloz del ser místico, como liquido dorado que salpica en una olla ardiente, quemando sus mejillas y  su nariz que percibió un aroma demasiado agradable, inmerecido para cualquier mortal. 

La siguió, seguramente era su apartamento, y mientras subían las escaleras, una música de ritual tántrico se hacía mas fuerte, en cada escalón, una barra de volumen se sumaba. Ella lo miraba esporádicamente, con una sonrisa irónica en su rostro, como llevándolo a una broma de mal gusto, y él la miraba, y sabía que algo bueno no podía esperar, pero que si resultaba esa fantasía que se fraguaba en su mente y corría por la sangre, si salía eso que deseaba, no había lugar para el arrepentimiento. 

Al entrar, Rubén se sintió en una galería, las paredes llenas con cuadros de pintura, pero cada una de un solo color, uno nada mas, sin figura, sin imagen fija, solo el color, cualquiera que fuera, muy atrayente. Él se perdía en esos bizarros cuadros. ¿Qué quería decir esta mujer con esa especie de galería en casa, una artista, bohemia, espíritu libre? eso se extinguió hace mucho en esta ciudad. Ya el nerviosismo comenzaba a hacer un remolino en la boca del estómago, sudaba más que nunca, y el escalofrío le llegaba en la nuca como tarántula chupa cerebros. Miraba la pintura de color verde, su preferido, cuando de pronto: "Son solo pinturas, pero para ti, al parecer son algo mas" le susurró al oído. Volteó a verla sobre su hombro, ni se percató que ella se había desprendido de sus telas. 

Pasaron siete minutos y Rubén ya cruzaba el umbral del apartamento, pálido, y bajaba las escaleras maquinalmente, inconscientemente. En su cerebro se determinaba algo cada vez con más seguridad, era el único camino luego de eso. Salió del edificio, y mientras cruzaba la "calle del sueño" sintió sus piernas volar, que se colocaban dónde estaba antes su cabeza. También escuchó la bocina de un borracho, los asombros no gritados, y por último el ennegrecimiento de su vista, esa que apuntaba a la ventana de la mujer, quien observaba como la pintura verde tomaba la figura de Rubén.


martes, 27 de mayo de 2014

Un café por favor

Un café por favor,
sin azúcar, amargo es el rencor,
sin leche, negro es el dolor,
caliente, de odio es el vapor.

Un sorbo desesperado,
me recuerda los besos robados,
la taza de regalo de cumpleaños,
y tu cuerpo en sueños inundados. 

Ella siempre lo pedía con cremora
o con leche condensada, si estaba en demora, 
sin embargo, se volvió tosca, lo pedía mas cargado,
el insomnio estaba siempre asegurado. 

Ella fue prefiriendo el café cubano,
yo siempre estuve con el aroma colombiano,
y luego de haber saboreado en sus labios el napolitano, 
con el de mi tierra, solo me he quedado. 

Por el resto de mi vida, me serviré el mas aguado, 
me lo tomare sin gracia, y tal vez con guaro, 
soy un adicto a la cafeína, (algunos dirán que un borracho),
por el desamor y sus agrios ratos. 


miércoles, 21 de mayo de 2014

Shh

¡Silencio! Necesito ruido blanco,
espeso y ordinario,
que oxigene mis oídos y mi piel,
que me tenga consciente de la literaria miel. 

¡No fastidies! no estoy en este mundo,
en esta realidad en la que tanto me confundo,
sea lo que sea, hazlo tu o lo haré después,
pero no me molestes, no esta vez. 

¡Vete! No estoy para huéspedes físicos, solo mentales,
solo para químicos que mi cuerpo segrega,
son por ahora elementales,
los fantásticos que con cada letra se regeneran,
tan especiales. 



viernes, 18 de abril de 2014

¡Gracias Gabo!

Hace algunas semanas fue trasladado al hospital por problemas respiratorios, y desde ese momento se pudiera pensar que iniciaba una crónica de su muerte anunciada, pero lo cierto es que un autor como Gabriel García Márquez será inmortal al mas puro estilo de su realismo mágico. 

Recuerdo cuando apenas a mis doce años comenzó esa ansiedad dulce por comenzar a leer, y por ahí, en algún rincón empolvado encontré "Crónica de una muerte anunciada". Solo pude leer quince paginas, no entendía nada, y ya se me había advertido lo confuso que me podía resultar. Quizá mi mente necesitaba mas conciencia, mas vivencia o mas historia, no se, lo cierto es que aun no estaba listo para leer a Gabo. 

Coquetee con la literatura durante toda mi pubertad sin lograr conquistarla. Ni siquiera en los controles de lectura, donde mi profesora me presentaba bellezas literarias, que yo, en mi inmadurez, era débil en cortejarlas y terminaba por ignorarlas. 

En mi ultimo año de colegio tuve un catalizador; un profesor joven, quien vestía al estilo brit-pop de los noventa. Bastante bohemio, de esos intelectuales raros de ver. Un día  preguntó a la clase el significado de la literatura. Todos dieron diferentes respuestas, claro, unas parafraseaban a otras, estaban las que rozaban la definición de los diccionarios y estaban las mas ridículas que ocasionaban en el interior de la mente del excéntrico catedrático alguna risa de decepción. 

Jamas olvidare lo que nos dijo cuando nos dio su definición personal de la literatura: Un vicio. Si, un vicio, de los buenos, o mejor dicho de los sanos, porque debo admitir que algunos de los insalubres me parecen buenos a su manera. Entonces me hice la pregunta ¿que es lo que tienen los libros para llegar a enviciarse a ellos?. En mi primer año de Universidad, como tarea debía leer 100 años de soledad, y al terminar de leerlo, esa pregunta fue finalmente contestada.  

Hoy en día he leído 5 libros de Gabo, y voy por el sexto. Si, los libros desde esa tarea, pasaron a ser mi vicio. Pase de leer esporádicamente a hacerlo constantemente. Ahora pienso que las mejores obras son aquellas que tienen de todo, y que de ese "de todo", nada parece estar de sobra. 100 años de soledad es uno de esos libros donde pasa de todo, y eso te maravilla cada vez mas, no solo cuando pasas la página, sino también cuando lo vuelves a leer. Para mi es un libro que cuenta la historia de latinoamerica. Porque a pesar de que Macondo es inspirada en su tierra natal Aracataca, todo cuanto sucede allí en su obra, es un reflejo de lo que ha acontecido en este mítico continente; La soledad que nos embarga, los amores fríos, las guerras políticas, etc. 

Una gran ayuda para reflexionar acerca de Latinoamerica, ademas de leer 100 Años de soledad, es escuchar el discurso "La soledad de América Latina" que dio cuando recibió el nobel a la literatura en 1982. En él, nuestra querida Tegucigalpa no se escapa de ser mencionada por el Colombiano; al decir que la estatua de Francisco Morazán ubicada en la Plaza Mayor, es en realidad la del mariscal Michel Ney del ejercito de Napoleón, comprada en París en algún polvoso deposito de estatuas usadas (seguido de eso hubieron risas en el público). Si, Honduras desde esos tiempos, y tal vez desde siempre sufre de la soledad de la cual a Gabo no se le olvidó señalar.

Es, probablemente, el autor mas importante de la literatura hispanoamericana, y de él se dicen tantas cosas; desde el puñetazo que Vargas Llosa le propinó (y que por cierto calificó con un 20 su copia de 100 años de Soledad), hasta su amistad controversial con Fidel Castro, pero sin lugar a dudas, después de su muerte, la mejor forma de hacerle tributo y de recordarlo es la que Isabel Allende propone, "En vez de llorarlo debemos seguir leyéndolo". 

Yo no solo me envicie, también me enamore de la literatura y de la mejor forma, leyendo a Gabriel García Márquez, por eso le doy gracias, ¡gracias Gabo!, a quien hasta antes del jueves santo, guardaba la ilusión de conocerlo, esa ilusión similar a la del coronel esperando su pensión. 


viernes, 11 de abril de 2014

Lo absurdo normalizado.

Y nunca es extraño ver en esta ciudad escenas absurdas, 
como un músico en la calle cuyo violín pide limosnas a oídos indoctos, 
o un hombre pintado de gris, simulando ser estatua para entretener a estatuas que pretenden ser hombres, 
o el beodo del barrio en silla de ruedas pidiéndome dinero creyendo que no lo he visto caminar. 

Lo raro en las calles es lo normal,
la paranoia en los rostros se ha convertido en la única expresión facial, 
el clima es caliente, pero las miradas son las más frías, 
y los únicos saludos entre los conductores son para sus madres. Usual. 

También abunda por todos lados la carencia de autenticidad,
el individuo se le ve a una velocidad tremenda en la carrera hacia la originalidad,
fuma un cigarro, toma un trago fino, y mientras escucha música clásica,
lo asalta la angustia al darse cuenta que se esfuerza demasiado. 

Que decir del arrogante que sabe pero no entiende, 
del que entiende pero no emplea, en la ciudad de lo absurdo,
donde se respira irrelevancia, lo trivial para llevar por favor.  
Aquí nadie toca fondo estando en él.

En esta ciudad nadie termina siendo feliz porque todos luchan por ignorar el sufrimiento, por normalizar lo absurdo.
                                                                 




jueves, 3 de abril de 2014

Paranoia

Las casualidades dejan de ser una probabilidad, esa sombra detrás de la tuya no es amigable a pesar de compartir la misma dimensión mística. Caminas aumentando la velocidad y las gotas de sudor, arrepintiéndote de no haberte tardado un poco mas antes de salir. Maldita paciencia que se ausenta en aquellos intervalos que de vez en cuando se escapan del infierno. Se acerca, decides disminuir el frenetismo de tus movimientos, piensas en las exageraciones, conjeturas absurdas (al rato no) ilusiones creadas por algún lóbulo temeroso. Vuelves a sentir el escalofrío, de esos que anuncian presencias malintencionadas. El aura es negativo y frío, frío en la espalda, a estas temperaturas debe ser aliviante, pero no lo es, no siempre el agua elimina la sed, a veces las pastillas soporíferas no aniquilan el insomnio, ni a los niños les divierte tanto el nuevo juguete. No, a veces el remedio sale peor que la enfermedad, o se vuelve el virus mismo. 

Te haces a un lado, pasa de largo, y lo ves, temblando, bañado en sudor, igual que tu él respira aliviado, ya que no apresuró su paso para hacerte daño ni tu disminuiste el tuyo para lastimarlo. 



martes, 1 de abril de 2014

Ya no lo hace.

Odiaba el olor a cigarro por la mañana, es algo ofensivo para mi, y ella aun lo hacía.
También condene esa manía de pedirme favores justo en el momento que mis gluteos se hunden alegremente en el sofá, y ella aun lo hacía.

Pero lo que ya no hace esa amarme, no, ya no lo hace.

En el éxtasis musical de mi canción favorita, le bajaba el volumen al equipo provocando una ira apenas contenida contra ella y el locutor que rara vez reproducía esa melodía. Y ella siempre lo hacía
Asimismo el café de la tarde que yo preparaba dos horas antes, y que, con gran entusiasmo colocaba mi libro, sacaba mis taza que llevaba un dibujo de Abbey Road (taza predilecta) solo para darme cuenta que lo único restante en la cocina era el aroma y la azúcar derramada. Y ella siempre lo tomaba.

Pero lo que ya no hace es amarme, no, ya no lo hace. café amargo por favor.





miércoles, 26 de febrero de 2014

Sala de espera.

Y bueno, me canse de disparar sin practicar la puntería, me canse, si, porque no hay nada más agotador que tratar de adivinar el tamaño del escalón para no tropezar.

Es tan angustiante, ser como el insecto que huye del cruel humano, trepando inútilmente una pared mojada que se burla ensordecedora a cada caída y rocío venenoso proveniente del cilindro macabro sostenido por el cruel humano.

Entonces me aconsejan: "Aguarde en la sala de espera sin esperar, porque esperar es sinónimo de amargura". Pero ni el purgatorio pinta tan cruel después de escuchar eso. Es casi imposible desanclar la expectativa, esa que busca la potencial pasajera, y no la soledad pasajera, esa ya esta desde hace mucho, sino la que sustituye dulcemente la soledad, esa que se me hace mar y yo tan tierra firme, se me hace estrella y yo tan años luz ¿por que no se me hace en los ojos y yo tan feliz? oh! hacedora torturadora inexistente, tan pensada, tan añorada, tan soñada. 

Mi imaginación te construye, de manera esporádica concluye en realidad, pero únicamente son destellos, chispas de ese fuego ideal para consumir dos almas. Pero no, solo me toca esperar, agregare una coma mas, tan necesaria como hiriente, a esa ultima oración; "solo, me toca esperar" en la sala de espera, donde la acción mas esencialmente agria es esa, esperar, madre de la ansiedad mas innoble. 


domingo, 16 de febrero de 2014

Mi espejo natural

Hay un árbol frente a mi habitación, me toca verlo todos los días y lamento no observarlo todos los días. Le agradezco porque es un muy buen estimulante para mis pensamientos, reflexiones y melancolías, entre mis top cuatro de escenarios ideales para cavilar, entre los cuales se encuentran también el caminar por las calles, el estar sentado en el trono o simplemente ver las estrellas. Este último con el clima imperante en mi medio se torna complejo.

Pero desvarío, vuelvo con el árbol que se aprecia desde mi ventana y mi balcón. Lo veo cuando estoy acostado en mi cama, (otro buen lugar para pensar que se me escapo mencionar) lo veo desde mi escritorio, lo veo cuando la puerta del balcón está abierta porque así lo prefiere mi Madre a pesar de los vampiros diminutos. Lo veo esporádicamente cuando leo un libro y clavo mi vista perdida en él mientras mi mente monta el escenario que el escritor me propone en esas letras que sostienen mis manos. En fin, lo veo y él me ve a mí.
Lo he contemplado frondoso, lleno de hojas de un verde oscuro intenso, recibiendo el alimento fortísimo del sol, tomando un aura sublime, se ve hermoso, digno de odas, y lo he visto mas esplendido con un color castaño en sus hojas superiores. Con cerrar un poco los ojos y hacer que la vista se vuelva un tanto borrosa, casi se puede percibir el rostro de una seductora napea con sus cabellos colochos sobre una cara apaciguada y nostálgica.

 También lo he visto oscuro; sin ninguna tan sola hoja en sus ramas, tétrico, perfecta decoración para una vivienda encantada. Lo he mirado turbado bajo un cielo gris y pesado, de esos que influyen en los comportamientos de las gentes. También me ha tocado verlo bajo la tormenta en la noche, tiende a desaparecer hasta que los rayos lo regresan a su lugar, pero su rebeldía nocturna-lluviosa hace muy breve su presencia.

Por lo tanto, lo he visto en buenos, malos, mejores y peores momentos, en sus alegrías y penurias, con una belleza total y con terrorífica apariencia. Y él también a mí, desde donde él esta tiene un muy buen marco de mi vida, él también me ha observado en mis buenos, malos, mejores y peores momentos, hermoso y deplorable, bajo el intenso sol de mi tiempo, con mis frutos que endulzan mi vida y también en medio de la tormenta, sin hojas, vulnerable con rayos a mi alrededor que intentan desestabilizar mas mis difíciles momentos. Ese árbol se puede considerar mi espejo natural, en el cual diariamente me veo y sin embargo olvido observar, misma situación que pasa curiosamente con el espejo normal.

Ese árbol ha compartido conmigo sus tiempos y viceversa, así como aquel que me acompaño en mi niñez y que cada cuanto nos compartía mangos a mí y a mi familia, quienes encontrábamos unión cuando lo necesitábamos aunque sea al devorar ese fruto. Ese mismo amigo de la infancia que tiempo después me entere que su tronco fue derribado llevándose consigo sus ramas y frutos, emulando quizá la vida que una vez tuve y que ahora solo es parte del pasado. Lástima que mi amigo de la infancia, lo que queda de él, no pueda recordar su magno pasado.

Y en cuanto al árbol amigo que tengo ahora, espero tampoco que en el futuro, me entere de su derribamiento, ojalá nunca exista tal muerte para él por lo pronto, y yo vaya a sentir ese pesar, que sentí con el que vivía de chico, ese pesar que estoy seguro que este árbol sentiría si yo llegase a irme primero que él.  

viernes, 14 de febrero de 2014

II Parte: Relato de Soledad "El bol de la lasaña"

Llevaba cuatro meses de relación, de verdad que estaba enamorada, cuando David me pidió que fuéramos novios fue el día más especial de vida, o así lo creía. Yo era feliz por lo que pensé que él también lo era, nunca dijo lo contrario.

Íbamos a celebrar nuestro primer día de San Valentín juntos, wauu! Puedo sentir la emoción aún, esperaba con ansias ese día iba a decirle que estaba enamorada de él, no un amor superficial un amor de esos que sientes que no es suficiente un corazón para guardarlo, pero fui tonta, creí demasiado en que David era un príncipe azul y termino siendo un ogro.

El 14 de febrero fui a su departamento, para darle una sorpresa, llevaba conmigo una deliciosa pasta que me tomó 4 horas para ser perfecta, para el hombre "perfecto", cuando me aproximaba a la puerta vi salir a David con una mujer que se veía más madura que yo. Recuerdo cada palabra que pronunció el "amor de mi vida" y aún se me parte el corazón. -Socorro es una niña, jamás me enamoraría de alguien así, pero ya ves, tengo que aparentar ser feliz porqué a mis padres no les gusta la idea de que ame a una mujer mayor que yo-

"amor" yo te amaba, yo confíe en ti, yo te pedí que no jugarás conmigo, yo te... Mi cabeza daba vueltas con todas esas frases, me culpaba por ser una "niña", si lo soy, pero por inocente y creer en ti; no se que paso exactamente, solo recuerdo el bol de la lasagna atravesar el silencio que dejo David al verme y caerle en su hermoso rostro, el rostro de la mentira.


Desde entonces David no se atrevió a buscarme, y saben? Eso me hizo aún más infeliz, desea que me siguiera, que me llamara o que me mandara un miserable mensaje donde me explicará que jugaba con ella y no conmigo, pero no paso, me di cuenta que nunca tuve su corazón y la fecha eso me duele más que su traición.

domingo, 9 de febrero de 2014

I Parte: Relato de Gustavo, "Carta Y rosa"

Tengo una amiga, y no, no me enamore de ella, pero ella fue quien me la presento...

La notaban mis ojos cada cuanto, y como no hacerlo, todos en mi colegio lo hacían incluyendo las chicas, para envidiarla, claro está, o bueno al menos eso creo. 

La conocí en invierno, la miraba diariamente y fue hasta cuando ya no lo hacía, ósea en vacaciones, que comenzamos a hablar gracias a mi amiga. Era demasiado hermosa para que mi mente llena de complejos llegará a pensar que algo pudiera surgir entre los dos. Pero a veces el destino te sorprende, o mejor dicho, te juega una cruel broma. 

-le gustas- era el mensaje por la red social. Me sorprendí, claro que si, a una diosa le gustaba un pobre diablo. Me costaba explicarlo, termine por concluir que simplemente soy un buen tipo, tesis que contradecía enormemente la realidad de los buenos tipos, que como dicen  por ahí, solemos ser los últimos, o veces ni eso.

En los momentos en que creí ser su futura pareja, en que nos encariñábamos de la forma más cursi, en ese absurdo e iluso intervalo, no nos vimos, y la espera a entrar de nuevo a la secundaría nunca fue tan impaciente. Yo deseaba tomarla de la mano, besarla, y verle los ojos al hablar con ella o nada mas estar a su lado, el más autentico amor (ilusión) de adolescente. 

Y bueno, en medio de la incertidumbre provocada por un hecho extraño en la red social; en la cual ella decidió poner el estado de comprometida conmigo, y al segundo día lo removió porque, según mi amiga, no era prudente que el ex novio lo mirara, ya que habían terminado recientemente, en medio de eso, llego el inicio de clases.

Soledad: No habían terminado seguramente. Si no, ¿por qué quitar el estado? 

Exacto, pero ella me dijo que si lo habían hecho, y yo le creí, y termino siendo verdad, sin embargo esa semana ella fue demasiado voluble, que hacía sospechar. Los dos primeros días fueron de ensueño, recreos con ella, manos juntas, ante la sorpresa de muchos, y no era para menos. Era, y no miento, porque ya no lo es, la chava más hermosa en el colegio, porque siempre hay una.

Y los últimos día de esa semana, antes del 14, se volvió indiferente (como odio la indiferencia de la mujer), incomoda al estar conmigo. Cuando la solicitaba, mandaba a decir cualquier increíble excusa, mi amiga decía: “ella es así”, y eso me molestaba en demasía. Pero estaba loco por ella, mi disposición por seguir con esa enfermiza relación (si se le podía llamar relación) era estúpidamente grandísima. A tal punto que el dichoso día llego y pensé que era perfecto para recuperar lo que no estaba seguro si había perdido, o si había poseído, ya que me que me había quedado satisfecho (ciegamente)  con la teoría de mi amiga "ella es así". En fin, aproveche la patética venta de cartas de amor, cortesía de los estafadores de ultimo año, mal hechas, simple, pero era lo único que pude conseguir por mi siempre precaria economía de colegiado. También una rosa, para variar un poco.   
     
                   (Los demás  rieron un poco)

                                                                                                                       Entonces baje al finalizar las clases, rápidamente para buscarla, iba excitado, ilusionado, de que el cariño tan fugaz que tuvimos, volviera. Rosa en la mano derecha, carta en la izquierda, llegue al patio del colegio, mis ojos la buscaban frenéticamente, de repente vi a su “ex novio”, mirándome con ojos furiosos, a su lado, ella, mirándome con ojos preocupados. Sentí que una piedra gigantesca se había estancado entre mi garganta y la boca del  estomago, y con esa piedra pase junto a ellos, me subí al autobús con la rosa y la carta ante las miradas de lastima de mis compañeros, que solo se comparan con las que tiene uno al ver a un perro con la pata fracturada. Llegue a mi casa y mi amiga me llamo para dar una explicación que por supuesto no creí, y esa fue la segunda desilusión y a la larga la que dolió mas; que mi amiga tratara de defenderla a ella después de haberme ensartado un cuchillo. Dos muy buenas razones para odiar este maldito día. Con el tiempo perdone a mi amiga sin decírselo, pues soy malo para ser resentido, es parte de mi inseguridad y poco querer a mí ser. 


Encendiendo un cigarrillo, con un gesto de manos y ojos aguados dio a entender que no hablaría más. 

lunes, 3 de febrero de 2014

Filofóbicos Anónimos en Febrero. (introducción)

Juan regresaba de la biblioteca creyendo que podría mantener su mente ocupada al leer un libro de historia durante el fatídico mes de febrero. Fue hace un año nada mas cuando vivió una tortura gigantesca en su corazón de joven; que se ilusionaba con amores fantásticos de esos que solo reproduce el subconsciente en sueños tan hermosos donde el despertar se convierte en la mayor decepción.

Algo no andaba bien cuando llego al parque. No había absolutamente nadie, esto le preocupo, empero, no sintió temor y menos cuando soplo el más agradable de los vientos, que acaricio su cara con ternura.

De repente escucho un ruido proveniente desde el centro del parque, un silbido melódico y atrayente. Se dirigió hacia el roble situado en medio de aquel verdoso jardín. Juan se lamentó de haber pasado tantas veces ignorando aquella belleza natural.

El silbido de nuevo, la persona debía de estar detrás del árbol. Al acercarse, Juan noto un contorno de corazón dibujado en el roble, al observarlo detenidamente, se dio cuenta que era un corazón roto.

-Algún desafortunado como yo- se dijo así mismo soltando una risa irónica.
Al palpar el grabado, el corazón se abrió dejando ver el interior del roble.

-Por fin llegaste hoy si estamos completos, Gustavo puedes comenzar tu relato- dijo un tipo de espalda robusta sentado en el suelo a la derecha de quien seguramente era Gustavo, y a la izquierda de él dos chicas formaban un circulo. 

-¿Dónde estoy?- pregunto Juan con cara sumamente confusa, mientras cruzaba el umbral del misterioso interior del roble. 

-Tú siéntate, ya te tocara contar tus penas de Día de San Valentín- dijo con amabilidad el tipo. Juan hizo caso con el ceño fruncido, se sentó entre Gustavo y una de las jóvenes, ellos estaban también algo aturdidos, y en esa atmosfera absurda Gustavo comenzó a relatar su historia. 

Continuara

Pensamientos de un Melancólico cliché.

El miedo a morir equivalía al que sentía cuando pensaba que te perdía
Te perdí, ahora estoy muerto en vida.

Lo que era antes importante, ahora ya no lo es tanto,
en tu vida yo era el importante, de tu boca el mas mencionado,
ahora no soy relevante para ti, ni para mi, solo para mi llanto,
el encierro es peor por ti, porque, si estuvieras aquí, todo sería mejor.
Lógica asesina.

Cuatro muros se carcajean, un reloj inventado,
marcaba el tiempo sádicamente cuando te tenía, la oscuridad fría,
cuando la realidad mata la fantasía y me hago mas daño.

La noche llena de calor, siento un frío por falta de amor.
Cada centímetro de tu cuerpo desarrolla un infinito deseo,
un sueño inalcanzable, !algo! algo egoísta, algo intocable,
necesidad del cuerpo vital, con tu alma volar y la noche interminable.

¿De que sirve insultarme a mi mismo? lo hice, paso, el Karma me fusiló,
el universo contra mi conspiró, el fin del mundo ya llego,
buenas nuevas en mi vida !no hay! en lo que me cuentan, importancia !no hay!
colores en mis ojos tampoco, (tan poco), han desaparecido, no sigo siendo el mismo.

En una  absurda burbuja en el fondo del mar, queriéndome ahogar,
pero aun veo la luz en lo mas alto (tortura total)
para salir solo necesito tu mano,
¿me la darás? ¿o tu mano sosteniendo otra está?








lunes, 20 de enero de 2014

"Su mejor amigo"

El tipo estuvo en su vida antes que yo, es posible que la conozca mejor que yo, no le he visto la cara y ya la odio. ¡JA! Mejores amigos ¡si cómo no! Paris y Elena eran mejores amigos, Monroe era amiga de Kennedy, las mujeres de Picasso eran sus amigas también, ¡A que quieren engañar estos!

-Me gustaría que lo conocieras- me dijo ayer. La perfecta coartada; presentármelo para que no hayan malos entendidos y de esa manera no sospechar nada. Que mente mas maquiavélica la de mi pareja, definitivamente la subestime. Y yo que he estaba tan feliz, tan ilusionado. Debí saberlo, muy bueno para ser cierto, ella tan hermosa y yo tan mendigo.

Pero como no lo pensé antes, ella: de piel suave, blanca, su cara rozando lo angelical, sus ojos oscuros y muy profundos, Hablando de Picasso, si la conoce en otro tiempo la pinta, o la pinto en el más allá y a Dios le pareció buena idea crear a semejante belleza, representarla y ponerla en mi camino para perderme en sus cabellos oscuros y brillantes ¿Cómo es eso lógico?

Me aliste, me bañe como nunca antes lo había hecho, y no te rías querido lector que en ocasiones especiales también te lavas más o mejor que de lo normal. Busque mi mejor camiseta, la más fina de botones, la planche hasta eliminar las mas mínima arruga (me tarde horas).  El pantalón, nunca lo plancho, pero me pareció preciso hacerlo esta vez. Jamás me peino y hoy lo vi necesario, no me gusta rasurarme, pero oh! Ella tenía que verme como el tipo más esplendido, el macho alfa en acción, intimidar a “su mejor amigo” era el objetivo principal.

Si no me era infiel, era cuestión de tiempo, si ya se, que desconfiado neurótico que soy, al rato ni siquiera piensa en eso, y ¡cuando la veo! Que equivocado estoy, pero como me sería infiel tanta ternura y cariño unido en esa persona tan hermosa, no puede ser, pero que cosas la que mi mente se imagina, estúpido. Pero él, ja ja ja, él claro que lo desea, yo también tuve mejores amigas muchachito, se lo que pretende. Y el nombre ¡Melton! ¿Quien se llamas así?

Llegue al restaurante, impregnado de perfume. Creo que exagere, olía demasiado, es ofensivo hasta para mi, ¡rayos!  Primer error. Busque la mesa, note algunas miradas de ciertas mujeres que se encontraban ahí, (lo lograste, eres el chico de la noche) paso por mi lado derecho un tipo con claro consumo de esteroides para aclararme que las miradas no eran para mí. Segundo error, nunca haber ido al gimnasio.

Note una mano que se movía de lado a lado, una mano limpia, con las uñas pintadas de azul claro (su color y el mío también) la vi, y está muy linda como siempre. No, no lo permitiré, no dejare que me la quites, ¿quién eres? muéstrate, pero ¡QUE! Esta con dos hombres, ¡dos! Tranquilo, respira, bueno es una batalla injusta, dos contra uno, yo puedo, vamos, si yo puedo, seguro me eliminan del mapa a mi primero para seguir disputándosela entre ellos, animales asquerosos.

-Hola querido, siéntate- ¡Dios que mujer! No puede ser tan cruel la vida para dármela y quitármela tan rápido.

-querido, como ya llevamos un mes de relación, considero que es momento que conozcas a un compañero fiel, que ha estado conmigo en los momentos más difíciles-

Y mi mente: ¿compañero? ¿fiel?

-Melton, René, René, Melton- presentó ella.

-Mucho gusto- dijo el cretino

-igual- respondí yo, pero que mentiroso soy, claro que no me da gusto, pero dentro de unos instantes me daré gusto en decirle lo que de verdad percibo de él.

-Y quiero presentarte también-

Y mi mente: Dale, presenta al otro contrincante, otro integrante de este cuadro que terminara ensangrentado, ¡oh si! Si no se apartan los aparto, cálmate, no hay necesidad de violencia, si la hay, no la hay, si la hay, ¡qué tipos estos!

-A Rodrigo- termino la oración.

Y ya tenía preparado mi  discurso para cuando ella se levantara para ir al baño, me escucharan estos que se creen que pueden llevársela y verme la cara de idiota.

-su pareja- añadió mi novia. 


-¿Cómo?- Pregunte yo.

-Sí, su pareja, Melton es gay, espero no te molestes, tú me dijiste que no eras homofóbico.

Le di la mano, con amabilidad, rectifique lo que ella dijo y me levante, me excuse y fui directamente al baño, a soltar la carcajada más grande de mi vida, ESTUPIDO NEUROTICO, INSEGURO DE PACOTILLA JA JA JA. 
fin